Photo by JOHN VATER

mariano tenconi blanco

 

cinca poemas de amor para una bailarina

 
 

1

Veo en facebook

la foto

de dos nenes mogolicos

dejando flores

en la tumba de su madre.

No son nenes.

No sé qué edad tienen.

Siempre es difícil saberlo.

Siempre es difícil saber la edad de los mogolicos.

 

2

Hoy me dijiste:

voy a dejar de bailar.

A ver si me logro dar a entender:

Cóctel molotov

Pájaro prendido fuego

El entusiasmo

Alta gata

Un matafuegos

Cheerleader posmoderna

Anfetaminas

Un viaje

Cuatro pibes re duros, de fierro

Mi dealer

Perfecta

Punkrocker

 

Vos no estás habitada por la fuerza.

Vos sos la fuerza misma.

 

3

Sos una bomba.

Se va a largar.

Llamame.

Qué paja.

Hola.

Estás perfecta.

No da.

Re da.

Hicimos bien.

No soy fachero.

A gmail.

Estás apurada.

Te pongo más.

Es imposible.

Te leo, entonces.

Era inevitable.

Me voy.

Fijate.

Super.

Te puedo cuidar.

Bajo yo.

Me muero.

Ponele.

Te va a entender.

Re barroco.

Ni lo pensé.

Hace frío.

Pidamos.

Me matás.

Flashero.

Te amo.

No nos pongamos solemnes.

Te lo pido.

Te lo pido por favor.

 

4

Nafta Dinamita Cóctel Molotov

Tsunami Portaaviones Mercurio

Inundación Rayo Electricidad

Cañita Voladora Vodka Polaco Ketamina

Yaciretá Dique Caballo

Electroshock Plutonio Dador de Sangre

Sólo puedo compararte con bombas caseras.

Sólo puedo compararte con desastres naturales.

Sólo puedo compararte con centrales eléctricas.

 

5

Mi pija es un teléfono inalámbrico.

Vos sos la base.

¿Para qué sirve la poesía?

Quiero que me digas

cómo va a ser el amor

dentro de cincuenta años.

Yo nunca me olvido de una cosa:

vos tenés superpoderes.

Yo estoy en el camino de la pureza,

de la purificación.

Un día,

arriba de una montaña,

en el Tíbet,

el maestro me va a decir:

la esperanza es un estado mental.